miércoles, 15 de diciembre de 2010

Bien, ¿pues qué?, amo la vida.

-Compadre, le digo que ya no se ponga así de triste. Mejor tómese otra cerveza.
-No compadre, si eso nomás me apendeja un rato. Yo lo que quiero es realmente sentirme bien.
-Pero compadre, ¡si siempre se anda quejando de todo!. Usted es un quejumbroso de primera; se le acaba la cerveza y se enoja aunque usted se la haya tomado.
-No, no, es que usted no sabe lo que es ser yo.
-¿Muy pinche especialito no compadre? Ya anda pedo, no se le vaya a salir lo puto.
-¿¡Pa' qué le sigo contando entonces!? Nomás se anda burlando de mí.
-Ya no se haga wey y sígame contando entonces...
-Compadre, me estoy muriendo. ¿Qué no me ve?
-No diga pendejadas, yo sabía que usté era un pendejo pero no tanto. ¿Cómo que se está muriendo?
-Sí compadre, cualquier día me le pelo.
-Mire, nomás le voy a decir esto una vez: No se ande con mamadas, ¿qué no le gusta vivir? Si la vida es re bonita. Usted siempre anda diciendo que es mejor ver el campo que tomar tequila. Me saca de pedo bien gacho compadre...
- Bien, ¿pues qué?... amo la vida. Pero me estoy muriendo compadre.
-Ya ni la chinga...

No hay comentarios:

Publicar un comentario