Emoción perfecta

Emoción perfecta, tempura al sol siempre viva

callejón negro en que el cielo y la luna resoplan

altivez cabizbaja en que las manos contemplan

la luz de una vida corta, certera y esquiva.

Corazón apurado que en el mar siempre corres

buscando alcanzar a la mañana entre las olas,

dejarás de andar entre la tierra de los hombres

cuando pierdas en el mar la luz de las farolas.

Esquivo de la vida, perdón antes sincero,

menosprecio del llanto que ampara en la mazmorra,

oscuridad avara que a toda vida borra

brillo que se pierde tras la puerta del cerbero.

¿Qué será de ti sombra, reflejo en el espejo,

cuando tenga que brindarte el Sol la sepultura

guardada en la terrosa cama de corta anchura

donde será de gala el festín de tu pellejo?

Mezquino es el tiempo, y pequeña la belleza

que ocultó la mirada tras el ojo brillante

perdiendo en el mar cuando la travesía empieza

defunción y victoria de una muerte tajante.